Tal día como hoy pero en 1998 Larry Page y Sergey Brin daban por finalizado el proyecto en que llevaban más de un año trabajando en la Universidad de Stanford: un buscador que indexaba las páginas publicadas en Internet. Lo conectaban a la Red y empezaba la historia de la herramienta de búsqueda más empleada por los navegantes, pues hasta un 63% de estos lo utilizan habitualmente.
Los principios suelen ser modestos y el de Google no lo pudo ser más, con Page y Brin valiéndose de un armario para almacenar 80 procesadores y un par de routers con los que catalogar y clasificar la totalidad de las páginas webs que existían hace 15 años y que en aquel momento eran indexadas por Altavista o Yahoo, que quedaron atrás en poco tiempo esencialmente por un par de factores: el ingente crecimiento del número de páginas webs y especialmente el exito de Google en el desarrollo de un algoritmo capaz de ordenar las páginas web conforme a la relevancia de las mismas y su contenido en relación con los términos de búsqueda que incluye el internauta.
Un algoritmo que, además, ha sabido evolucionar con el ritmo de desarrollo de la propia Internet, los contenidos sumados a la misma y los propios hábitos variables a lo largo del tiempo de los usuarios. Tan solo un par de años después aparecería Google AdWords, la herramienta de gestión de la publicidad online que en el fondo sería la mayor fuente de ingresos de Google, que desde entonces ha logrado crear un completo entorno de herramientas, cambiante y evolutivo, en el que junto a apariciones exitosas también han desaparecido otras, como el lector de RSS Google Reader, sin que desde la empresa se haya llegado a dar una una explicación convincente.
Han pasado 15 años y Google se ha convertido en el buscador por excelencia, omnipresente y casi omnipotente y sin un contrincante que por el momento parezca capaz de hacerle frente. Y no es que Bing o el renovado Yahoo no funcionen adecuadamente, pero como animal de costumbres que es el hombre y acostumbrado fácilmente a lo que funciona bien parece que cuesta (miedo al cambio, esa es otra) abandonar las costumbres y explorar otras posibilidades.
Como celebración de cumpleaños, y al estilo de otras efemérides que se celebran desde la página principal del buscador, este ha cambiado hoy su habitual aspecto por una piñata que, como con otros doodle (dibujos, animaciones o incluso pequeños videojuegos) permite al visitante pasar un rato de diversión.
Fuente: vINQulo