Durante meses, se ha estado especulando sobre quién compraría WhatsApp. Era un movimiento que se veía venir: muchas empresas habían hecho grandes inversiones para lograr dominar en la mensajería pero ninguna había dado frutos. Conseguían una masa de usuarios pequeña y las únicas que han ido a la zaga, con distancia, han sido Line y WeChat.
Todo apuntaba a que sería Google quien se haría con esta ficha pero finalmente será Facebook, la red social de Mark Zuckerberg, quien añadirá la aplicación a su lista de adquisiciones mediáticas como Instagram. ¿Cuál es su futuro? En su blog oficial vemos algunas pistas.
Tras hacerse con el rey de la fotografía, se hace con el de la mensajería
Facebook tiene una gran aplicación a nivel técnico. Le ha llevado un tiempo pulirla pero Facebook Messenger es a día de hoy una opción muy atractiva a la hora de intercambiar mensajes de texto con amigos y familiares. Sin embargo, no era suficiente para coronarse en esta categoría. Hacía falta algo más.
Con la mensajería ha ocurrido igual y aunque esta es una guerra en la que entran muchos agentes y con estrategias muy diferentes, ninguna ha logrado hasta la fecha llegar a esos más de 450 millones de usuarios (70% activos) que tiene WhAtsapp. ¿La solución? Tirar de chequera y poner sobre la mesa 19.000 millones de dólares.
¿Es mucho o es poco? La cifra no es chica si tenemos en cuenta que Facebook pagó en su día mil millones por Instagram. Ahora paga dieciséis veces esa cantidad para incorporar Whatsapp a su ecosistema. ¿Os parece mucho? ¿Qué tal si os decimos que es más del doble de lo que pagó Microsoft por Nokia?
También es cierto que hay que separar las cifras. No se trata de 19.000 millones para la pequeña compañía de mensajería sino 4.000 millones en efectivo y el resto repartido en 183.865.778 acciones de clase A (valoradas en 12.000 millones), las que cualquier inversor puede adquirir. Además, otros tres mil millones irán en acciones a los empleados de la aplicación.
Ahora bien, ¿cuál será su futuro? ¿Seguirá siendo una aplicación independiente? Tal y como explica WhatsApp en su blog, seguirán siendo una aplicación autónoma e independiente. Se seguirá el mismo modelo de negocio, dicen que de ningún otro modo se habría conseguido el acuerdo que hoy están anunciando.
Veremos si acaban siendo fieles a su palabra pero esperemos también que la entrada de Facebook sirva para que WhatsApp dé algunos pasos al frente en cuestiones en las que se ha quedado un poco atrás: seguridad, presencia en múltiples dispositivos… Estaremos atentos a las conferencias de Zuckerberg y Jam Koum la semana que viene en el Mobile World Congress.
Fuente: Xakata